Manuel Hernández (Ta Safi)
Kivi ndakuni yo mií yo xi yo xa’a ku ña xika yo kuatyi
De Alaska hasta la Patagonia, los pueblos autóctonos de estas tierras han desenmascarado el colonialismo, lo desnudan y lo dejan al descubierto, como un sistema cruel e inhumano, por eso el 12 de octubre se ha convertido en el día de la dignidad y la resistencia indígena, debido a que desde 1492, el racismo se impuso de tajo, el despojo se volvió normal, el trabajo forzado y la esclavitud eran parte de la cotidianidad.
Hay memoria de un pasado oscuro y el presente tampoco nos ofrece un panorama distinto, si nos ponemos a revisar la geografía de nuestro continente, sigue habiendo despojo, las minerías a cielo abierto son un claro ejemplo, ahora los pueblos luchan contra el colonialismo capitalista, que necesita materias primas para seguir subsistiendo, ya sea mano de obra barata, tierras donde hay minerales preciosos, se apropia de sus aguas y muchas veces la única alternativa que tienen es migrar, por eso actualmente Estados Unidos tiene millones de indocumentados que son parte de los pueblos nativos, que tuvieron que trasladarse a otros espacios, en donde difícilmente seguirán reproduciendo la cultura de sus ancestros.
Los estados nacionales les niegan el reconocimiento pleno, como en Chile donde los Mapuches siguen en constante lucha por sobrevivir, en México hay megaproyectos, en otras regiones el nuevo enemigo es el narcotráfico, quien se convierte en aliado de los estados nacionales y de las empresas trasnacionales, hay colusión y beneficios para ambos en muchos casos.
El nuevo colonialismo no solo daña lo que es América, también han mutilado África con los Diamantes de Sangre, así como lo hicieron en el pasado exportando esclavos, hoy este continente quienes lo oprimieron siguen manejando los hilos del poder económico para los beneficios de los países occidentales.
Los pueblos nativos no solo luchan por la vida, también luchan por su territorio y por sus culturas, en el entendido de que no se puede beber crudo o gasolina, los metales preciosos o el diamante no se comen, la contaminación de las grandes fábricas no se pueden respirar, es la diferencia con los que luchan y con los que quieren domar o más bien destruir la naturaleza, porque unos piensan en acumular riquezas mientras los nativos piensan en la vida.
Esta pequeña reflexión es la geografía del saqueo y destrucción de américa a manos de españoles, ingleses y portugueses. En los libros de texto no se explica del todo bien, en los grandes medios de comunicación se maquilla la historia, se dice que se tiene que superar, que toda conquista es justificable, pero en américa nunca hubo el encuentro de dos mundos, el contacto se realizó a sangre y fuego, el resultado fue un genocidio generalizado, acompañado de codicia, tortura y muerte, no solamente humanas sino de culturas enteras.
Nuestro continente, no fue descubierto, no hubo encuentro de dos mundos, lo que si pasó fue el invento de un nuevo territorio a modo para poder conquistarlo y someterlo bajo sus leyes y bajo la religión de los que se impusieron, por eso el 12 de octubre no se celebra, se recuerda como el día de la decadencia, explotación y marginación, de parte de los imperios con sed de saciar sus deseos por oro. Mientras en la CDMX este 12 de octubre marcharon estudiantes de distintas instituciones, integrantes de organizaciones sociales y del Congreso Nacional Indígena afines al EZLN, protestaron contra lo que consideran la militarización del país y contra los llamados megaproyectos, porque consideran que hay “Militarización, paramilitarización, feminicidios, espionaje, despojo de territorios, guerras abiertas y encubiertas, asesinatos y hostigamiento en contra de periodistas, defensores de derechos humanos, organizaciones sociales y activistas, megaproyectos que afectan la vida entera de personas y comunidades, contaminación del planeta, crisis económica y devaluaciones” denunciaron a través de un comunicado.